El autocuidado es la base del equilibrio psicológico. No se trata de egoísmo, sino de responsabilidad con uno mismo.

Cuidarte implica respetar tus límites, descansar, alimentarte bien y buscar momentos de desconexión. Aprender a decir “no” también es una forma de amor propio. Cuando te cuidas, tu energía y tu capacidad para cuidar a otros se fortalecen.

Ejercicio práctico

Elige tres gestos de autocuidado para esta semana (caminar, desconectar del móvil, poner un límite…).
Registra cómo cambia tu estado emocional después de cada uno.

Cuidarte es la mejor forma de sostenerte y seguir creciendo.